«Como son la cabeza de la escala administrativa, (una menor remuneración) afecta de paso a los demás sueldos de la escala», explica el diputado RN Diego Schalper.
«Hay que afectar a toda la repartición», opina su correligionario Jorge Rathgeb.
«Sería incongruente», retruca el senador Felipe Harboe (PPD).
La reforma constitucional para rebajar los sueldos de los parlamentarios y las altas autoridades del Estado, aprobada por la Cámara de Diputados el pasado 27 de noviembre, sigue con problemas debido a que se busca una fórmula para que no afecte a los demás empleados públicos.
Este proyecto contempla una reducción de un 50 por ciento de la remuneración hasta que un organismo distinto al Congreso, como el Banco Central, lo fije.
En la Comisión de Constitución y Justicia del Senado trabajan desde el 3 de diciembre en la solución para que esta reducción no afecte a los trabajadores públicos.
El senador Felipe Harboe (PPD), presidente de la instancia, señaló que «sería incongruente» que la rebaja de la dieta parlamentario afecte a los funcionarios públicos.
«Esta reforma podría afectar a cerca de 100 mil funcionarios públicos. Lo que nosotros queremos es rebajarnos las dietas los senadores, ministros, diputados, subsecretarios, los más altos sueldos (…) Pero que no afecte a los trabajadores del sector público, (porque) sería incongruente», dijo Harboe.
El diputado Jorge Alessandri (UDI) indicó que «no tiene nada de malo que un ministro gane menos que una persona en su Ministerio que ha hecho carrera, que lleva 35 años ahí. No me complica eso y si hay que cambiar una ley para que eso sea posible, cambiemos la ley, porque es distinto ser de confianza del Presidente que haber hecho carrera 30 años para llegar a un Ministerio».
«Los que le responden al Presidente o al electorado, bajarse el sueldo me parece lo correcto», insistió.
«No se midieron las consecuencias»
Desde el oficialismo, el diputado RN Diego Schalper señaló que, al haber legislado rápido, «no se midieron las consecuencias» de la rebaja de sueldo de las autoridades.
«Cuando las cosas se hacen mal, evidentemente uno se olvida de las consecuencias. Entonces, una de las consecuencias que tendría el esquema actual es que, efectivamente, afectaría el sueldo de otras autoridades públicas, y como son la cabeza de la escala administrativa, de paso afecta los demás sueldos de la escala», señaló el diputado.
Schalper advirtió que «esto hay que hacerlo bien, midiendo las consecuencias y no realizando las cosas apurados».
Su correligionario, el diputado RN Jorge Rathgeb, cree que se deberían disminuir todas las remuneraciones en las reparticiones públicas donde se bajará el sueldo de sus autoridades.
«Hay que afectar a toda la repartición. De otra manera no podríamos entender que los que tienen mayores responsabilidades queden con una remuneración inferior o la misma de quienes tienen menos responsabilidades y toman decisión menos importantes. Hay que hacer una reforma, tenemos que escuchar a la gente en la calle», dijo Rathgeb.
Matías Walker (DC) indicó que «eso lo va a determinar una comisión externa. Nosotros lo que estamos proponiendo es que una comisión externa haga borrón y cuenta nueva y que en forma objetiva establezca parámetros para las remuneraciones de los altos cargos del Estado».
«Ellos fijarán una escala, ellos fijarán criterios, ellos determinarán por ejemplo si la asignación profesional en el caso del Parlamento y otros cargos del Estado tiene que tener una asignación especial o no», sostuvo.
Se espera que este proyecto de ley se termine de tramitar en la Comisión de Constitución del Senado a fines de marzo.
Fuente: Cooperativa
